Muy bien, hablemos de la indulgencia de morosidad: tu billete para un respiro temporal en los pagos de tu préstamo. Aquí está la verdad:
¿Qué es la indulgencia de morosidad? La indulgencia de morosidad es como hacer una pausa en la maratón de reembolso del préstamo. Es una forma de recuperar el aliento ampliando el plazo para devolver el préstamo. Puede que consigas reducir tus pagos o incluso tomarte un descanso de ellos. Suena bien, ¿verdad?
Interés en la escena: Pero espera. Mientras te tomas ese descanso, los intereses no están durmiendo la siesta. Todavía está allí, colgando y acumulando en todos los tipos de préstamos estudiantiles federales. Así que prepárate para esa parte.
Dos tipos de indulgencia: Hay dos tipos de indulgencia de morosidad: obligatoria y discrecional. La indulgencia de morosidad obligatoria es como el pase VIP automático. Si cumples ciertas condiciones, como hacer unas prácticas de medicina u odontología, o prestar algún servicio nacional, la obtienes sin preguntar. En cambio, la indulgencia de morosidad discrecional depende del administrador de tu préstamo y de tu situación particular.
Conseguir el respiro: Entonces, ¿cómo se pulsa el botón de pausa? Habla con tu gestor de préstamos. Ellos son los que tienen las llaves del reino de la indulgencia. Eso sí, tendrás que presentar documentación que respalde tu historia.
El truco: Ahora, aquí está la primicia - mientras que la indulgencia le da un tiempo de espera de los pagos, es como un arma de doble filo. El interés que está teniendo una fiesta durante este tiempo de espera? Sí, no va a desaparecer. Se está uniendo a la fiesta del préstamo, añadiéndose a tu cantidad total de reembolso. Así que, recuerda, puede que pagues más a la larga.
Considere sus opciones: Si la tristeza por el pago de los préstamos te golpea con fuerza, no olvides que hay otras opciones. Piensa en darte la mano con un plan de reembolso basado en los ingresos o dar a tus préstamos un abrazo de grupo con la consolidación. Estas podrían ser mejores opciones antes de ondear la bandera de la indulgencia de morosidad.
Y ahí lo tienes, la primicia sobre la indulgencia de morosidad. Es como un breve descanso para tu préstamo, pero recuerda que no es un billete gratis: los intereses siguen acechando. Así que, antes de lanzarte, ten en cuenta todos los movimientos del tablero.